En súper chinos, la caída llega al 12%
El consumo masivo sigue sin evidenciar señales de recuperación, como espera largamente el Gobierno. Con la tendencia de los meses anteriores, agosto muestra una caída de las ventas de los hipermercados que oscila entre el 3 y 5% interanual, medidas en unidades, al tiempo que los supermercados chinos bajan hasta 12% sus operaciones comerciales.
Desde las grandes superficies comerciales confirmaron ese nivel de retracción y no atisban ninguna señal de recuperación, al menos en el segmento de los alimentos, bebidas, y artículos de limpieza y tocador. “En lo que va del mes, vemos una caída del 5 por ciento en el consumo masivo, aunque otras cadenas están cayendo menos; no se ve la luz al final del camino y esperamos medidas oficiales”, explicaron ayer desde uno de los hipermercados.
Para el Gobierno es una pésima noticia, ya que -a partir del cierre de algunas paritarias- se esperaba un repunte en las ventas de las grandes superficies comerciales. Lo que ocurre, Ministerio de Trabajo mediante, es que muchas de estas paritarias no han sido homologadas, por lo que los aumentos aún no han llegado al bolsillo de los trabajadores y en algunos casos, con 120 días de retraso.
En tanto, Fabián Zeta, el presidente de Comafru (cámara de mayoristas frutihortícolas del Mercado Central) señaló que “las ventas están un 30 por ciento con respecto al año pasado y hay un parate impresionante. Lo que nos duele es que las verdulerías y supermercado siguen remarcando a lo loco y no tienen motivos; el Gobierno debe intervenir”.
Por otro lado, en el sector de los hipermercados aseguran que las segundas marcas siguen ganando terreno en la canasta de los consumidores y en especial, ven con gran preocupación a las compras en los supermercados mayoristas. “Tenemos que buscar nuevas estrategias para hacerle frente a los mayoristas que ganan terreno todos los meses. No deberían legalmente venderle a los consumidores finales pero en este país, se puede todo”, afirmaron.
El comprador compara precios de forma permanente y busca alternativas más económicas para cuidar su bolsillo, es el fenómeno en el que coinciden las consultoras especializadas en consumo. “Estamos frente a un consumidor hipersensible a los precios de los productos en góndola. Sin importar el nivel de ingresos de las familias, todos nos vimos obligados a revisar nuestra estructura de gastos, a definir prioridades, elección de marcas y canales”, explican desde estas firmas.